Para todos aquellos que en su ciudad sufran los badenes para frenar la velocidad a diario, y a menudo con mala señalización como es el caso de Ponferrada, un malagueño ha inventado un badén que al superarlo a la velocidad adecuada se hunde y permite el paso, en cambio si se circula a una velocidad superior permanece rígido. El sistema consiste en un material hueco que permite la entrada de un fluido de uno a su adyacente según pasa la rueda por encima, pero si se va demasiado rápido no da tiempo a que el fluido que hay dentro del badén pase al siguiente y el neumático no se hunde.
José Antonio Aguilera, malagueño de 26 años es el inventor de esta técnica trabaja como instalador eléctrico y ya ha patentado otra serie de inventos.
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